El verano es una época del año en la que la piel con acné se enfrenta a múltiples desafíos puesto que al aumentar las temperaturas, el sudor se convierte en una constante, y la exposición solar puede desencadenar o empeorar los brotes.
Además, muchos productos que usamos regularmente para combatir el acné pueden volverse demasiado agresivos para la piel durante esta temporada, dejando la piel irritada o incluso más sensible a los daños solares.
La clave para mantener tu piel con acné en verano está en encontrar un equilibrio entre tratar las imperfecciones y proteger la barrera cutánea.
A lo largo de este artículo, vamos a explorar las mejores prácticas, ingredientes y hábitos para garantizar que el verano no sea un enemigo de tu piel.
Causas del acné en verano
Para empezar, es importante entender por qué el acné puede empeorar en verano.
Los cambios en el clima pueden alterar la producción de sebo y la barrera natural de la piel, lo que puede propiciar la aparición de brotes.
Aquí te explico algunos de los factores más comunes que influyen en la piel con acné en esta temporada:
- Sudor y obstrucción de poros: El sudor y la humedad pueden provocar que los poros se obstruyan más fácilmente, creando el ambiente perfecto para que las bacterias causantes del acné prosperen.
- Aumento de la producción de sebo: Las temperaturas más altas hacen que la piel genere más grasa de lo normal, lo que puede resultar en más granos y espinillas.
- Exposición solar: Aunque se suele creer que el sol seca los granos, en realidad puede agravar el problema. El daño solar afecta la barrera de la piel, lo que lleva a una sobreproducción de aceite para compensar la sequedad y empeora el acné.
- Uso de protector solar inapropiado: No todos los protectores solares están diseñados para piel con acné. Aquellos con ingredientes comedogénicos pueden empeorar los brotes.
Cómo preparar tu piel con acné para el verano
La preparación de la piel para enfrentar los desafíos del verano es esencial.
1. Limpieza adecuada
Durante el verano, la limpieza debe realizarse dos veces al día para eliminar la suciedad, el sudor y el exceso de grasa que se acumulan en la piel.
Es importante usar limpiadores suaves, pero que sean efectivos en controlar el sebo.
Busca productos con ingredientes como el ácido salicílico o el peróxido de benzoilo, que ayudan a destapar los poros y prevenir los brotes.
2. Hidratación ligera
Muchas personas con piel con acné tienden a evitar la hidratación por temor a que los productos empeoren su condición, pero este es un error común.
Incluso la piel grasa y propensa al acné necesita hidratación, especialmente en verano, cuando el calor y la exposición solar pueden secar la piel.
Opta por cremas o geles hidratantes ligeros, que no sean comedogénicos y que proporcionen la humedad adecuada sin obstruir los poros.
3. Protección solar
La protección solar es crucial para cualquier tipo de piel, pero en el caso de la piel con acné, es especialmente importante.
Exponerte al sol sin la protección adecuada no solo puede aumentar la producción de sebo, sino que también puede dejar manchas o cicatrices en las áreas afectadas por el acné.
Asegúrate de usar protectores solares no comedogénicos, preferiblemente con una fórmula ligera y en gel para evitar obstruir los poros.
2 cosas a evitar durante el verano
Además de seguir una rutina adecuada de cuidado de la piel, hay ciertos hábitos que deberías evitar durante el verano para prevenir la aparición de más acné.
1. Exceso de productos grasos
Evita los aceites pesados, los maquillajes de cobertura completa o los protectores solares en crema que contengan ingredientes comedogénicos. Elige fórmulas ligeras y de base acuosa.
2. No lavar la piel después de sudar
Después de realizar ejercicio o pasar mucho tiempo al aire libre, es crucial que limpies tu piel.
El sudor acumulado puede bloquear los poros y, junto con la suciedad y la grasa, convertirse en un caldo de cultivo para las bacterias que causan acné.
Ingredientes esenciales para la piel con acné en verano
Algunos ingredientes ayudan a mantener la piel limpia y libre de brotes, mientras que otros la calman y alivian.
Ácido salicílico
El ácido salicílico es uno de los ingredientes más eficaces para el tratamiento del acné porque ayuda a exfoliar las células muertas de la piel y a destapar los poros, previniendo la formación de espinillas y granos.
Niacinamida
La niacinamida es conocida por sus propiedades calmantes y su capacidad para reducir la inflamación.
También regula la producción de sebo, lo que la convierte en un aliado ideal para el verano.
Aloe vera
El aloe vera es un excelente ingrediente para calmar la piel irritada y reducir el enrojecimiento.
Además, es ligero y no obstruye los poros, lo que lo hace perfecto para el uso diario en pieles con acné.
Consejos adicionales para mantener la piel con acné bajo control
Aquí te dejo algunos consejos adicionales para que puedas mantener tu piel con acné bajo control incluso durante los meses más calurosos:
- Mantén tus manos alejadas del rostro: Tocarte la cara con frecuencia transfiere suciedad y bacterias, lo que puede empeorar el acné.
- Usa productos específicos para piel con acné: Asegúrate de que todos los productos que uses, desde limpiadores hasta maquillajes, estén formulados para piel propensa al acné.
- Bebe suficiente agua: Mantén tu piel hidratada desde adentro bebiendo al menos 8 vasos de agua al día.
- Consulta a un dermatólogo: Si el acné empeora durante el verano, no dudes en buscar la opinión de un dermatólogo.
Recuerda que cada piel es única, por lo que lo que funciona para una persona puede no ser adecuado para otra.
¡Prueba diferentes métodos y productos hasta encontrar lo que mejor funcione para ti! Y si tienes alguna duda o sugerencia, no dudes en dejar un comentario abajo. ¡Estoy aquí para ayudarte!
Fuente As De Mexico